
El último post estaba dedicado al mango: esa fruta tropical, que destaca por su perfume embriagador, por su dulzura y sabor, por refrescar y también por la cantidad de nutrientes y antioxidantes que contiene.

En el mismo post, además, os contaba cosicas sobre sus variedades, beneficios, cómo elegir un mango maduro y la manera que suelo utilizar para pelarlo. Así que no me entretengo más y paso directamente a una de mis recetas favoritas con este ingrediente: ¡la confitura de mango! ¡Ya veréis qué sencilla, rápida y riquísima!
Aprovechando haberla subido a Instagram como ficha, la pongo aquí también, por si os va mejor para guardarla.
Espero que os animéis a probarla, porque de verdad que vale muchísimo la pena… me la comería a cucharadas, jajaja.
Nota: la cantidad de azúcar se puede aumentar, si preferís una confitura más dulce. Como máximo, se puede poner una cantidad de igual peso al de la fruta. Cuanto más azúcar se añada, más tiempo se conservará la confitura.
Besicos!!


Ingredients
- 2 mangos maduros (sin pelar, unos 800 g; limpios y sin hueso, 480 g)
- 220 g de azúcar blanco
- 1/2 limón
- 1/2 vaina de vainilla
Instructions
Pelar los mangos y recoger la pulpa en una olla con bordes altos, junto con los demás ingredientes.
Poner al fuego y dejar hervir a fuego moderado y removiendo a menudo, durante unos 10 minutos.
Quitar la vainilla, triturar con el minipimer y dejar hervir otros 5 minutos, o hasta obtener la consistencia deseada.
Nota: si es necesario, se puede comprobar que la confitura esté lista con la prueba del plato.
Esta prueba consiste en poner un plato pequeño en el congelador, durante 5 minutos. Se saca y se deja caer una punta de confitura en el mismo. Inclinar el plato; si la confitura se desliza, hay que seguir cocinándola otro ratito; si no, ¡está lista!
Rellenar unos tarritos (3-4 pequeños), previamente esterilizados y perfectamente secos, con la confitura caliente.
Cerrar y dejar enfriar los tarros boca abajo, tapados con un trapo.
Cuando estén fríos, darles la vuelta, comprobar que hayan hecho el vacío y guardar en la nevera.

