Damas y caballeros, oficialmente estamos en otoño. Y, para darle la bienvenida, hoy quisiera compartir una receta especial, a base de un delicioso ingrediente otoñal: tortelli de calabaza.
Se trata de un tipo de pasta rellena, tipico de algunas zonas de Italia: la de Ferrara, Mantua y Reggio Emilia. De una zona a otra (y de una abuela a otra) los ingredientes y las dosis varían un poquito…hay quien le pone mostaza, un huevo, pan rallado….
Después de haber leído unas cuantas recetas, he intentado basarme en las más sencillas y, a continuación, os presento mi versión.
Ingredientes:
Para la pasta (2 personas):
200 g de harina
2 huevos medianos (a temperatura ambiente)
1 pizca de sal
Para el relleno:
500 g de calabaza (la pulpa cocinada pesa 300 g aprox.). La que he usado es la ” calabaza cacahuete”.
20 g di amaretti molidos (son crujientes galletitas de almendra; se encuentran en tiendas de alimentación italianas)
20 g di parmesano rallado
una rallada de nuez moscada
1 pizca de sal
Para condimentar:
una nuez de mantequilla
abundante parmesano rallado
Procedimiento:
Relleno:
Abrir la calabaza, limpiarla de las semillas y de los hilillos; cortarla en trozos. Poner estos últimos en una fuente forrada con papel de hornear y cocer en el horno a 170º, por una horita. La calabaza estará lista cuando podréis pinchar la pulpa con un tenedor, sin hacer esfuerzos.
Cuando hayáis sacado la calabaza del horno y ésta esté tibia, separar la pulpa de la cáscara usando una cuchara o un cuchillo. Chafar la pulpa con un tenedor o con el minipimer, añadir el parmesano, los amaretti molidos, la nuez moscada y la sal (¡muy poca!). Mezclar y reservar.
Si el relleno resultara aguado:
1. Que no cunda el pánico. Añadir poco parmesano y ver si la situación mejora. Hay quien le añade pan rallado, pero atención porque, si se exagera, el relleno podría resultar duro después de la cocción.
2. La próxima vez, mejor si usáis una calabaza de otro tipo.
Para la pasta:
Verter la harina sobre la mesa y ponerla en forma de volcán. En su interior, poner los huevos y la sal. Con un tenedor, revolver los huevos, cogiendo, poco a poco, harina de los lados. Luego, amasar con las manos, desde el exterior hacia el interior, hasta que toda la harina se haya absorbido y obtengáis una masa lisa.
Si la masa resultase demasiado dura o no absorbiese tooooda la harina:
Añadir un par de cucharadas de agua tibia y seguir amasando, hasta obtener una bola compacta y lisa.
Tapar con un bol y dejar descansar de media hora a una hora.
Después del descanso, extender parte de la masa en una lámina fiiina, pero sin pasarse (con mi máquina de la pasta he llegado al número 6); mientras tanto, tapar la pasta que no se usa con el bol, para que no se seque.
Cortar la lámina así obtenida en cuadrados de 6×6 cm aprox. y colocar, en el centro de cada uno, una pequeña nuez de relleno.
Doblar la lámina para formar un triángulo y sellar bien los bordes. Poner el triángulo alrededor de un dedo y chafar las dos puntas para unirlas y dar forma al tortello.
Mientras se hacen, colocar los tortelli sobre una superficie enharinada.
Calentar una olla con abundante agua. Cuando esté hirviendo, echar sal gorda y dejar caer 10-15 tortelli. Mezclar y cocer de 6 a 10 minutos (eeeeehhh no se puede concretar más, depende del grosor de la pasta y de cuánto tiempo los tortelli hayan esperado sobre la superficie enharinada). ¿Cómo saber si están listos? No hay más remedio que probar uno.
Sacarlos del agua con la cuchara escurridora y ponerlos en un bol con una nuez de mantequilla.
Seguir con la cocción de los demás tortelli (10-15 cada vez).
Servir con abundante parmesano.
Si sobrara relleno:
Se puede usar para condimentar una pasta seca corta…o para rellenar unos vol-au-vent…una quiche…¿¿más consejos??
Con esta receta participo en el contest “Pastissima” de Chezuppa.it