En Internet se encuentran distintas técnicas para hacer terrones de azúcar caseros… os explico la que, después de varias pruebas, me ha ido bien para obtener terrones que no se destrozan al rozarlos, pero que se disuelven rápidamente en una bebida caliente.
Qué se necesita:
una tacita de café de azúcar (blanco, moreno o una mezcla de los dos)
agua
un molde para cubitos de hielo o bombones
tiempo y paciencia =)
Procedimiento:
Mojar una tacita de café con agua y, sin que dentro quede agua, pero sin secarla, llenarla con azúcar. Mezclar un poquito, hasta obtener una consistencia de arena mojada.
Si tenéis un molde para terrones pequeñísimos, como el mío, llenar el molde hasta el borde con la mezcla y apretar bien con los dedos. Si el molde es más grande, llenarlo hasta la mitad.
Y ahora paciencia…hay que resistirse toda una noche sin sacar los terrones del molde…sé que es difícil, pero conviene esperar para no arriesgarse a romperlos.
Después de unas cuantas horas, ¡ya podréis desmoldar y mirar y remirar con afecto a vuestros pequeños cubitos relucientes!
5 comentarios
Los hago!!! Muchas gracias
Jeje, bueno, seguro que es…diferente =)
Un abrazo 😉
Que lujo tomar un café con estos terrones.
Un beso!
Ohhh… Me han encantado!!! Esto también lo apunto para hacerlo
🙂 me alegro, muchas gracias, Susana!! Ya me dirás qué tal. Un saludo!